La técnica de adobillo en la restauración de dos ascensores en Valparaíso, Chile
Resumen
La ciudad de Valparaíso posee características geográficas y culturales que condicionan su desarrollo y evolución arquitectónica. Hoy, los ascensores de Valparaíso, funiculares de transporte público, representan un gran ejemplo del patrimonio industrial que existe en Chile. Se trata de los dos primeros ascensores construidos en Valparaíso, siendo el del cerro Concepción inaugurado en 1883, y el del cerro Cordillera el año 1887. Emplazados en pleno casco histórico de la ciudad, los ascensores están compuestos de un programa que contempla una estación inferior, una estación superior y la rodadura (por donde transitan los carros en planos inclinados). La construcción de la edificación es caracterizada por un sistema de madera-tierra, conocido localmente como adobillo, que posibilitó la construcción en inclinadas pendientes y que representa un sistema constructivo local ampliamente presente en gran parte de los edificios históricos de esta ciudad puerto. Se trata de un sistema mixto donde la estructura está conformada por una tabiquería desarrollada en madera de pino oregón americano, la cual es rellenada con adobillos, para así dar estabilidad estructural y generar un buen comportamiento ante sismos. En este contexto se desarrolla la ejecución de las obras de restauración de estos dos emblemáticos ascensores que unen el llamado “plan”, parte baja de la ciudad, con los cerros Concepción y Cordillera. Se llevó a cabo el reconocimiento de las evidencias halladas producto de la liberación de revestimientos, lo que ha llevado a la definición del estado de conservación del adobillo, para así proponer la intervención en la consolidación estructural de éste sistema constructivo mixto.