LA modernidad es modernidad técnica*
Resumen
Lo que conocemos como modernidad en Arquitectura (o aquello que denominamos Movimiento Moderno) debe entenderse principalmente como modernidad técnica, emergente de las innovaciones tecnológicas resultantes de aplicaciones acuñadas por el desarrollo científico desde fines del siglo XVIII como la electricidad o las maquinarias de vapor, ya que ella es específica para caracterizar novedades modernas tales como la densidad urbana y el crecimiento en altura o la flexibilidad y la transparencia de los nuevos edificios. Incluso aquello que caracteriza lo moderno como otra cultura estética que rompe con lo histórico no es nada más que una expresión consecuente de poner en evidencia la nueva tecnología. Pero el desarrollo tecnológico y su pasaje de lo mecánico y eléctrico a lo electrónico auspicia un permanente progreso técnico que incluso alcanzará a ser autopoiético en la creciente autonomía de la técnica por la técnica misma, instaurándose, incluso, una peligrosa confianza en la que los errores o desastres técnicos, como en el ejemplo de Chernóbil, solo pueden ser superados con mas tecnología, así como desarrollos de lo técnico que se abren a la inteligencia artificial o la suplantación de lo real-material por lo virtual-telemático.